En Mayo decidí ampliar mi estrategia de prospección y sumar twitter a la ecuación.
La primera pata es el email márketing.
Ya te contaré tranquilamente por qué.
La segunda es LinkedIn.
En LinkedIn tengo unos 1.500 contactos y me siguen cerca de 2.800.
Cada día prácticamente creo contenido, y prácticamente todos los meses me llega algún cliente.
La tercera es un club de negocios donde practico el networking, y que también me aporta clientes de forma bastante recurrente.
Pero vi por el rabillo del ojo un movimiento.
Y me propuse trabajar mi marca también en Twitter.
Sí, me puedes encontrar igual que en todas las redes. Yo no me complico.
@soysamukortajarena.
La cuestión es que una de las cosas en las que más tiempo invierto es en analizar, no solo lo que yo hago y el retorno que me da, sino también lo que hace el resto.
Y hay una cuenta que me llamó la atención.
+170.000 seguidores (cuando tu estás leyendo esto ya son más de 200.000, ya sabes, si quieres ir al día suscríbete a la newsletter aquí).
Ojo que se dice pronto.
Hay gente que va de triunfador por twitter y dándose palmaditas en la espalda con 7, 10 y 15 mil seguidores.
Y lo entiendo.
Pero lo de este tío va más allá.
Cuando tienes ese impacto en cada tuit (vale que no lo verán los 160.000, pero el engagement que tiene cada tuit es muy alto), mas de 1500 likes en cada post, 30 o 40 comentarios, un montón de retuits sabes que ese tío, si lo tiene bien montado debe estar ganando pasta.
Porque tiene una comunidad.
Fíjate.
Otro miembro de la red da su opinión y dice.
«No hagas contenido viral que no es una forma de crecer».
Y este señor contesta ( te copio el tuit literalmente):
“Lo suyo realmente es tener ambas cosas. Capacidad para viralizar + audiencia fidelizada. Cuando viralizas te abres a nuevas audiencias y con la fidelización consigues engagement. Conseguir ser viral debe formar parte de una buena estrategia de marketing”
Yo lo veo claro, pero el primero insiste:
«Ser viral» no es una estrategia. Y no siempre es bueno. Construir una audiencia fidelizada es mejor que tener un momento de viralidad.
Y que hago yo?
Me voy a su perfil y veo que tiene 5.000 seguidores.
Pilla el punto.
Si le das un consejo a alguien sobre cómo hacer que crezca su cuenta, asegúrate de tenerla más grande.
Que quieres que te diga, yo estoy por hacerle caso al primero, que ya ha pasado de los 200.000.
El caso es que twitter está siendo un lugar muy propicio para conseguir “mandanguita” de la buena.
Así que, si tienes un negocio online y no estás en twitter quizás sea el momento de planteárselo.
Es una de las redes de las que hablo en mi taller de comunicación.
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